¿Hinchada, pesada o con culpa por comer?
Si comiste algo que te cayó mal
lo último que necesitas es regresar a hacer dieta.
Esta es una guía para que cuando la comida te dé síntomas gastrointestinales o dolor de cabeza no pienses que lo has hecho mal, te re-traumatices con pensar que deberías volver a estar a dieta o tengas un atracón por pensar en todo-o-nada o blanco-negro.
Es una guía de suplementos pensados para personas que quieren alivio y mejoría digestiva antes, durante o después de comer, sobretodo para disminuir culpa o estrés mental.
Por lo que si al inflamarte, sobretodo si es por comer cosas ricas, piensas en restringir, controlar o te aumentan las ganas de tener atracones u obsesiones con la comida (sobretodo si ha habido algún trastorno alimentario), esta guia descargable lo resuelve.
Primero, deja que te cuento de dónde sale y cómo te ayuda en tu proceso de salud sostenible.
Hace 3 años vivía como pez globo constantemente, a pesar de tratar de siempre “comer bien”.
Y con eso dormía mal.
Y me salió un sarpullido en la piel que me picaba tanto que tuve que cortarme las uñas para no hacerme daño.
Esto me pasó cuando estaba escribiendo mi último libro, y la fecha de entrega me hacia sentir una presión que no sabia manejar, por eso mi cuerpo lo manifestó por mi.
El hecho de sentirme como si tuviera 4 meses de embarazo no solo me afectaba físicamente sino mentalmente por la carga de imaginarme que alguien me diera las felicitaciones mientras me rozaban la barriga cuando lo único que habia adentro era el almuerzo maldigerido de esa tarde.
La causa principal era un estómago tenso y un intestino estresado.
¿Y qué se hace cuando la comida te cae mal?
¿Pasar hambre?
¿Y si tienes trauma con restringir y dietas?
Preocuparte por la comida solo empeora el cuadro de estrés.
Vale, te tengo una solución realista, sostenible y trauma-informada.
En esta guía tienes herramientas que acompañan tu transición hacia una relación más libre y funcional con tu comida.
Lo primero es aceptar que tu cuerpo está teniendo síntomas de:
Hinchazón.
Pesadez.
Gases.
Estreñimiento
Dolor abdominal.
Ansiedad post atracón por los síntomas que estás teniendo.
Y luego nos enfocamos en no empeorar la situación.
Esto es para ayudarte a desinflamar,
disminuir el estrés mental por el discomfort físico,
disminuir el miedo, bajarle a la vigilancia de síntomas e imagen corporal,
mejorar la digestión lo antes posible
y así ayudarte a continuar sanando con la comida.
Sino todos los años de culpa, control o trastornos de conducta alimentaria, empiezan a salir a la superficie a toda fuerza y cada vez te sientes menos en confianza con tu cuerpo, perdiendo tiempo y energía en el mismo tema de siempre: comer.
Sentirme de forma incómoda con tu cuerpo no se resuelve solo con meditar, ni solo con masticar lento.
Se empieza con regular sistema nervioso, con guía, y cuando necesario con suplementos que se adapten a tu caso.
Y te lo digo claro de una vez:
La culpa se reduce también cuando tu digestión no es un tema de miedo y control.
Cuando no sientes necesario compensar porque no te sientes como pez globo.
Y para que vuelvas a sentir confianza física en tu proceso.
¿Hinchada, pesada o con culpa por comer?
Si comiste algo que te cayó mal
lo último que necesitas es regresar a hacer dieta.
Esta es una guía para que cuando la comida te dé síntomas gastrointestinales o dolor de cabeza no pienses que lo has hecho mal, te re-traumatices con pensar que deberías volver a estar a dieta o tengas un atracón por pensar en todo-o-nada o blanco-negro.
Es una guía de suplementos pensados para personas que quieren alivio y mejoría digestiva antes, durante o después de comer, sobretodo para disminuir culpa o estrés mental.
Por lo que si al inflamarte, sobretodo si es por comer cosas ricas, piensas en restringir, controlar o te aumentan las ganas de tener atracones u obsesiones con la comida (sobretodo si ha habido algún trastorno alimentario), esta guia descargable lo resuelve.
Primero, deja que te cuento de dónde sale y cómo te ayuda en tu proceso de salud sostenible.
Hace 3 años vivía como pez globo constantemente, a pesar de tratar de siempre “comer bien”.
Y con eso dormía mal.
Y me salió un sarpullido en la piel que me picaba tanto que tuve que cortarme las uñas para no hacerme daño.
Esto me pasó cuando estaba escribiendo mi último libro, y la fecha de entrega me hacia sentir una presión que no sabia manejar, por eso mi cuerpo lo manifestó por mi.
El hecho de sentirme como si tuviera 4 meses de embarazo no solo me afectaba físicamente sino mentalmente por la carga de imaginarme que alguien me diera las felicitaciones mientras me rozaban la barriga cuando lo único que habia adentro era el almuerzo maldigerido de esa tarde.
La causa principal era un estómago tenso y un intestino estresado.
¿Y qué se hace cuando la comida te cae mal?
¿Pasar hambre?
¿Y si tienes trauma con restringir y dietas?
Preocuparte por la comida solo empeora el cuadro de estrés.
Vale, te tengo una solución realista, sostenible y trauma-informada.
En esta guía tienes herramientas que acompañan tu transición hacia una relación más libre y funcional con tu comida.
Lo primero es aceptar que tu cuerpo está teniendo síntomas de:
Hinchazón.
Pesadez.
Gases.
Estreñimiento
Dolor abdominal.
Ansiedad post atracón por los síntomas que estás teniendo.
Y luego nos enfocamos en no empeorar la situación.
Esto es para ayudarte a desinflamar,
disminuir el estrés mental por el discomfort físico,
disminuir el miedo, bajarle a la vigilancia de síntomas e imagen corporal, mejorar la digestión lo antes posible
y así ayudarte a continuar sanando con la comida.
Sino todos los años de culpa, control o trastornos de conducta alimentaria, empiezan a salir a la superficie a toda fuerza y cada vez te sientes menos en confianza con tu cuerpo, perdiendo tiempo y energía en el mismo tema de siempre: comer.
Sentirte incómoda con tu cuerpo no se resuelve solo con meditar, ni solo con masticar lento.
Se empieza con regular sistema nervioso, con guía, y cuando necesario con suplementos que se adapten a tu caso.
Y te lo digo claro de una vez:
La culpa se reduce también cuando tu digestión no es un tema de miedo y control.
Cuando no sientes necesario compensar porque no te sientes como pez globo.
Y para que vuelvas a sentir confianza física en tu proceso.
Vale, entonces no es sobre los polvitos mágicos.
Es para acompañar tu transición física y emocional después de años de control.
Es poder comer un helado en verano y tener herramientas si después sientes malestar.
No para castigarte.
No para "limpiarte".
Sino para sostenerte con recursos o atravesar el trauma de restringir y control.
Porque para mí, la libertad alimentaria no es comer todo sin pensar.
Es tener la capacidad de elegir, sin miedo, y también saber cómo cuidarte después.
Sin pánico. Sin caos. Sin volver al trauma.
Entonces ¿Quieres un estómago menos tenso,
y un intestino menos estresado,
sin tener que volver al control?
¿Con recursos físicos, emocionales
y cuidados mecánicos como temperatura
y regulación de sistema nervioso?
Entonces sí.
Esta guía es para ti.
Y no vas a encontrar nada igual en el mercado.
Ni siquiera con Chat GPT.
Por dentro de la guía tienes:
Suplementos post-dieta para situaciones reales:
Después de un atracón.
Durante mudanzas, viajes o cambios de rutina.
Cuando llevas varios días sentada trabajando sin parar, sin movimiento, ni pausas digestivas.
Después de una comida con alcohol o alimentos que te sientan pesado.
En días de mucho silencio corporal (no sabes leer tus señales).
O cuando tengas digestión irritable, como cuando estás en fase lútea.
Marcas específicas para cada situación con sus links respectivos, dosis, y momentos del día.
Herramientas de regulación del sistema nervioso y digestión emocional.
Cuidados físicos sin restricción: temperatura, mecánica digestiva, apoyo post comida.
Ciencia clara y explicada: para que sepas por qué esto te pasa y cómo puedes ayudarte
Sin moralismo, sin reglas, sin más control.
Preguntas Frecuentes
¿Esto reemplaza un tratamiento médico o nutricional?
Esta guía es un acompañamiento alternativo a tu transición post-dieta, pero no sustituye terapia, ni diagnóstico médico, ni consultas de nutrición.
¿Sirve si ya no tengo reglas, pero sigo con malestar?
Sí. Está pensada justo para quienes ya no restringen pero siguen con síntomas digestivos, culpa, o confusión corporal.
¿Qué suplementos incluye?
Los más útiles para digestión lenta, hinchazón, gases, ansiedad post comida, post-atracón, estreñimiento leve, etc. Con marcas, dosis y momentos de uso.
¿Incluye regulación emocional también?
Sí. Hablamos de sistema nervioso, temperatura, estresores psicológicos y prácticas que ayudan sin controlar, ni compensar.
¿Qué pasa si soy intolerante?
La guía incluye una clase para identificar estos casos, pero NO resuelve ni aporta probióticos, enzimas, o suplementos específicos para intolerancias, porque tendría que evaluar casos clínicos, exámenes, etc. Es una guía para casos generales, si necesitas nutri digestiva, tengo la recomendación perfecta para ti.
¿Tiene sentido usarla aunque no haya tenido TCA?
Obvio. Si vienes de años de dietas o de comer con miedo, esta guía es para ti. Hayas tenido un TCA o no, la conducta alimentaria se afecta con el control y la rigidez, y por ende, las digestiones también.
¿No es mejor trabajar en no comer lo que no me sienta bien y ya?
Si tienes trauma con la restricción, no puedes eliminar alimentos y ya. Esto es para acompañarte sin rigidez. La disciplina también es saber cuándo pedir apoyo y contar con recursos para reducir culpa, mientras vas sanando.